LO QUE TIENES QUE SABER DE LAS GARRAPATAS

28-03-2021

Es el momento, busco un lugar accesible y concurrido, o no, no importa. Esperaré lo que haga falta mi oportunidad...

Alguien se acerca, allá voy. Me agarro fuerte, se acabaron los días de hambre. Introduzco mi mandíbula en mi huésped, si no le matan mis microbios, tendré comida para una buena temporada…

UNA PEQUEÑA INTRODUCCIÓN

Las garrapatas son pequeñas pero matonas. Se trata de parásitos externos pertenecientes a la familia de los ácaros. Son uno de los grupos de parásitos externos más importantes a tomar en cuenta, no solo por los daños directos que causan a los animales sino también por la enorme cantidad de enfermedades y microorganismos que transmiten.

No es cosa de broma, ya que estas enfermedades pueden tener consecuencias muy graves, e incluso pueden resultar en la muerte del animal, sin olvidar que además, algunas de ellas pueden transmitirse a las personas.

LA FORMA DE CONTAGIO

Aunque los meses de mayor riesgo de infestación por garrapatas suelen ser los correspondientes a la primavera y el verano, no hay que olvidar que estos parásitos pueden estar presentes durante todo el año. Son unas supervivientes...que se le va a hacer.

Pero no solo eso, sino que tienen una paciencia infinita, así que acostumbran a estar sobre los arbustos, ramas y hierbas altas hasta el momento que pasa por ahí un animal. Momento en el que se agarran a él como si no hubiera un mañana, confirmando con ello que la espera ha merecido la pena.

Y es aquí donde se produce el primer contacto directo entre la puñetera garrapatilla y nuestra mascota. Entonces, con sus afilados y puntiagudos apéndices bucales, agujerean la piel para chupar la sangre de su víctima mientras segregan una sustancia adherente para asegurarse el sitio. Lugar en el que si las dejas, chuparán y chuparán hasta alcanzar cuatro veces su tamaño y aumentar hasta cien veces su peso.

Y no, no pienses que como tu gato no sale de casa no hay posibilidades de contagio. Recuerda que pueden adherirse también a tu ropa o tu calzado y darse un paseo hasta tu hogar en busca de su víctima. ¡Transporte público gratis y comida de bienvenida al llegar! ¿Quién no se apunta a eso?

MEJOR PREVENIR QUE CURAR

Siendo que algunas enfermedades transmitidas por las garrapatas pueden llegar a ser mortales para nuestros animales, es esencial asegurarse de que estos indeseados parásitos permanecen bien lejos de nuestros peludetes.

No las subestimes, como hemos comentado antes, cualquier perro o gato, sea cual sea su edad o estilo de vida, corre el riesgo de infestarse con garrapatas.

Entonces, ¿Qué podemos hacer para prevenir la situación?

Aquí son fundamentales los productos de desparasitación, ya sean pipetas, champús, collares o cualquier otro producto hecho para tal fin. Estos productos matarán rápidamente las garrapatas y evitarán que lleguen a fijarse en la piel de nuestros peludos, teniendo algunos de ellos un efecto residual que seguirá actuando durante un tiempo contra ellos. Ellas serán listas… pero nosotros más, y tenemos mil productos para ello.

Aunque las estaciones de máxima proliferación de las garrapatas suelen ser la primavera y el verano, se recomienda administrarlos durante todo el año.

Usa este tipo de productos como parte de la prevención y si tienes dudas, tu veterinario te aconsejará acerca del producto y la pauta de aplicación más adecuada para cada animal, tanto en función de la zona, como de la estación, como de su edad (por ejemplo, hay productos que no son recomendables aplicar a cachorros menores de 3 meses).

A su vez, no olvides cepillar y examinar regularmente el pelaje de tu mascota, sobretodo tras un paseo por el parque o el campo. Revisa la parte baja de su abdomen, las axilas, los hombros, las orejas, el cuello… Generalmente las zonas donde su piel es más fina y presenta irrigación sanguínea. En el caso de los gatos suelen ubicarse con gran frecuencia en cuello, orejas y cara, como si de un piercing se tratara.

¿Y QUÉ HAGO SI HAY UNA GARRAPATA EN MI MASCOTA?

Lo primero de todo, mantén la calma.

Hay que tener en cuenta que tienen su cabeza prácticamente metida en nuestra mascota, así que si nos aventuramos a sacarla nosotros mismos tenemos que asegurarnos de que al hacerlo, no dejamos parte de su cuerpo en el interior de nuestro animal, ya que eso podría conllevar a una infección.

IMPORTANTE: No te dejes llevar por los remedios caseros de la abuela que hay por internet, algunos de esos remedios pueden hacer más daño que bien a tu mascota. En algunos casos los ahogan y favorecen que su regurgitación llegue al torrente sanguíneo de tu mascota. Quemarla, cortarla o aplastarla tampoco son buenas opciones, pues debes evitar cualquier acción que favorezca el contacto de los fluidos de la garrapata con la sangre de tu perro o tu gato, por lo peligroso que podría ser.

La forma correcta de eliminarlas es usando unas pinzas del tipo de las que se usan para depilar las cejas o similares. Si son curvadas y con punta estrecha mejor, pues lo que queremos es enganchar la cabeza de la garrapata. Una vez cogida la parte más cercana a la piel de nuestro animal, realizaremos una tracción continuada y suave hasta lograr sacarla de la piel. En el mercado existen pinzas específicas para ello.

Si no quieres arriesgarte, existen productos como sprays o desparasitadores internos que harán que las garrapatas salgan corriendo en todas las direcciones. No abogamos por la violencia, pero cerciorate, como tu consideres más adecuado, de que esas garrapatas NO vuelvan a parasitar a nadie.

Por ejemplo en nuestro caso, son varios los animales que han llegado con multitud de garrapatas enganchadas a su ser. Solemos darles Bravecto, que es un desparasitador interno, y los rociamos con Frontline, un spray que también hace que salgan volando de allí.

Una vez extraída no hay que olvidar curar la herida. Al fin y al cabo nuestro peludete se ha llevado un buen mordisco. La limpiaremos con agua y jabón, y posteriormente aplicaremos un antiséptico. Así, unas 3 veces al día.

Ante cualquier duda consulta a tu veterinario, y recuerda, cuanto antes se extraiga la garrapata de la piel de nuestra mascota, menor será la probabilidad de que contraiga alguna enfermedad transmitida por ellas.